LA DIFERENCIA

Estamos acostumbrado a que en los gimnasios y clubes deportivos de todo el mundo se realicen largas sesiones aeróbicas sobre la bicicleta estática, la cinta, o similares.

En CrossFit, en cambio, se trabaja exclusivamente con sesiones cardiovasculares más cortas y de alta intensidad.

El cardio de alta intensidad o anaeróbico se distingue por su elevada capacidad para aumentar drásticamente la potencia, la velocidad, la fuerza y la masa muscular. Este acondicionamiento anaeróbico nos permite ejercer grandes fuerzas en un breve periodo de tiempo.

Quizás el aspecto del acondicionamiento anaeróbico merece mayor consideración ya que no perjudica a la capacidad aeróbica. De hecho, si está correctamente estructurada, la actividad anaeróbica puede ser usada para desarrollar un nivel muy alto de entrenamiento aeróbico, sin la pérdida de músculo que se relaciona con un alto volumen de ejercicio aeróbico.

A diferencia de los gimnasios tradicionales, en un box de CrossFit los atletas no pasan largo tiempo realizando numerosas repeticiones en máquinas que aíslan diferentes músculos. Aquí encontrarás a los atletas realizando movimientos complejos, desarrollando grandes niveles de fuerza, con cargas elevadas o no (según el perfil y situación del atleta), y a bajas repeticiones. Y tras estas sesiones de ejercicio, breves pero intensas, sus cuerpos pasan a un estado de reposo casi total.

La potencia es otro de los pilares que sostienen el sistema de CrossFit, se define en términos simples como, la capacidad de hacer algo de manera “intensa y rápida”, y se relaciona con casi todos los aspectos positivos del entrenamiento, incremento de la fuerza,  rendimiento, masa muscular, y la densidad ósea, que surgen en proporción a la intensidad del ejercicio.

La potencia es un aspecto siempre presente en el ejercicio diario de CrossFit, se desarrolla a través del trabajo con tiempos cortos y cargas elevadas. En CrossFit, “la rutina es el principal enemigo”, el ideal de CrossFit es entrenar para cualquier contingencia, con la máxima gama de estímulos, incluso introduciendo el azar si es necesario.

Cualquier otra opción es entrenamiento deportivo específico, y no un programa de fuerza y acondicionamiento físico total.

Huye de la rutina en los entrenamientos

Mientras que en los gimnasios tradicionales los socios se limitan a pasar cierto tiempo en las máquinas, o en el mejor de los casos a completar la rutina que se les ha asignado, para CrossFit la motivación por mejorar día a día es un factor determinante.

El elemento competitivo ha sido siempre uno de los pilares de la filosofía CrossFit. La puesta en marcha de CrossFit es como la de un deporte, es revolucionario.

Esto nos hace tan diferentes como nuestros movimientos funcionales, o nuestras sesiones de alta intensidad o la constante variabilidad de nuestros programas. Las sesiones de entrenamiento de CrossFit son en esencia eventos competitivos que pueden establecerse por tiempo, por intensidad, por repeticiones o por rondas, y cada vez que se realizan hay que tratar de mejorar los resultados.

Para alimentar este espíritu de superación, en cada gimnasio CrossFit hay una pizarra donde se anotan los tiempos y los resultados obtenidos por los atletas, que pueden ser publicados también en Internet para compartirlos con toda la comunidad CrossFit.